- Recomendó a los presentes plantearse objetivos claros sobre lo que quieren ser
- “El cosechador de Estrellas” es el título de la conferencia y el libro que promueve el ponente
José Hernández Moreno, ofreció una conferencia a la que asistieron en su mayoría estudiantes de Secundaria en el auditorio de UNIVA, con quienes compartió la receta con la cual dijo haber alcanzado ser astronauta de la NASA en el 2009.
Se dirigió a los adolescentes por espacio de hora y media, en la que comenzó diciendo que se vale soñar como él lo hizo siendo adolescente cuando decidió que quería ser astronauta.
Su historia inició por una sequía registrada en el Municipio cuando su padre el señor Salvador Hernández trabajaba en el campo y producto de los daños tuvieron que emigrar a los Estados Unidos. La forma en la que su padre se casó a los 18 años con la señora Julia y el nacimiento de sus hermanos y él que es el menor de los cuatro.
Como hijo de migrantes, comentó que sus padres pasaban 9 meses de trabajo en tres ciudades en Estados Unidos y estaban 3 meses de invierno en La Piedad, hasta que una de sus maestras, preocupadas por su educación, habló con sus papás para hacerles ver que viviendo de esa forma, sus hijos no podían echar raíces, desarrollar y explotar el potencial que tenía, principalmente José que era el más pequeño. Así que fue el último año que regresaron y permanecieron por ese tiempo. Posteriormente únicamente duraban 3 semanas.
Pero fue sin dudas cuando el primer hombre llegó a la luna, que mientras veía la transmisión en televisión al término le dijo a su padre que quería ser astronauta. En ese momento, su papá le dijo que sí podía ser lo que él quisiera pero para lograrlo, tenía que seguir cinco pasos que fueron: Definir su meta; reconocer qué tan lejos estaba de ella y nunca darse por vencido; crear una ruta para llegar a ella; estudiar; trabajar y estudiar mucho.
A estos cinco pasos él agregó un sexto que es la perseverancia, pues en su intento por alcanzar las estrellas, lo rechazaron 11 veces en la NASA y fue hasta el doceavo intento que fue aceptado, pero para lograrlo, tuvo que estudiar, prepararse y analizar las cualidades de los candidatos que habían elegido antes que él para reorientar su formación.
Pues para cumplir con su meta planteó a los adolescentes tres pasos: Cumplir con los requisitos mínimos del puesto o cargo que deseen obtener; estudiar las cualidades de las personas que hayan sido seleccionadas y hacer algo sobresaliente que los distinga de los demás.
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